La semana pasada el empresario hotelero italiano Giuseppe Cipriani y el arquitecto uruguayo Rafael Viñoly presentaron el proyecto de restauración y ampliación del hotel San Rafael en Punta del Este. Las imágenes de la maqueta de Viñoly despertaron rápidamente la polémica.
Se trata de un proyecto muy ambicioso, que implica la restauración del hotel primero, su ampliación y la construcción posterior de un complejo de edificios. Entre ellos se incluye un rascacielos de 60 pisos y 300 metros, casi el doble del actual edificio más alto del país, la torre de Antel, que alcanza unos 158 metros. En ese elemento se ha centrado el debate.
Los autores de la iniciativa destacaron que estas nuevas edificaciones mantendrían el color característico del San Rafael (porque se revestirían en ladrillos) e incluso sus icónicos techos a dos aguas. Ello ocurriría incluso en la torre más alta.
¿Cuáles fueron los argumentos que los emprendedores manejaron para defender la inversión que están preparando, del orden de los 400 millones de dólares?
Hoy En Perspectiva escuchamos los fragmentos más significativos de la exposición que Cipriani y Viñoly realizaron el miércoles 30 de mayo en la sala de sesiones de la Junta Departamental de Maldonado, donde también respondieron preguntas de algunos de los ediles.
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Presentación a la Junta Departamental de Maldonado del proyecto para el hotel San Rafael