Una de las políticas más disruptivas de la primera presidencia de Tabaré Vázquez fue la lucha contra el tabaquismo, una iniciativa le valió una de las distinciones nternacionales más importantes, cuando en 2018 fue galardonado como “Héroe de la Salud Pública de las Américas” por la Organización Panamericana de la Salud.
Así hablaba al recibir aquel premio:
Creo que en esta lucha el pueblo uruguayo merece una especial distinción. Se puede hacer la mejor reglamentación, con la mejor intención, las mejores leyes, o los mejores decretos presidenciales. Pero si no logramos consensos políticos y, sobre todo, consensos sociales que acepten esas directivas, generalmente esas leyes terminan siendo meros papeles guardados en un cajón de un escritorio. Pero al recibir esta distinción, ante ustedes me comprometo a seguir trabajando para controlar no solo la epidemia del tabaquismo si no también contra los otros principales factores de riesgo de enfermedades no transmisibles: el sedentarismo, la dieta insana y el alcoholismo, y todos nosotros estamos comprometidos en esa lucha.
Poco después de asumir Vázquez anunció una batería de medidas para combatir el tabaquismo. Entre ellas, la prohibición de fumar en espacios cerrados interiores de todo lugar público o privado, así como en los lugares públicos en general. En los bares y locales de recreación se aceptaría la implementación de un área exclusiva para fumadores. Otro aspecto clave dentro de esa serie de medidas fue la regulación de la información. El Ejecutivo emitió un decreto por el que todos los envases de tabaco debían contener en su exterior advertencias sanitarias que describieran los efectos nocivos del producto.
El doctor Miguel Fernández Galeano, subsecretario de Salud Pública en la época, trabajó junto a Vázquez en esta materia. Por eso lo invitamos a conversar con nosotros esta mañana.
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Foto: Javier Calvelo / adhocFotos
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