Tras el voto uruguayo a favor de exhortar al Gobierno de Nicolás Maduro a reconsiderar las elecciones, consecuencias en el panorama político nacional.
La Organización de Estados Americanos emitió una declaración en la que afirma que las elecciones que Venezuela tiene pautadas para el próximo 22 de abril no serán "democráticas, transparentes y creíbles de conformidad con las normas internacionales". La novedad fue el giro en la postura uruguaya respecto del Gobierno de Nicolás Maduro: se votó a favor de esta declaración, lo que no había sucedido pocos días atrás con el Grupo de Lima.
El organismo resolvió exhortar al Gobierno de Venezuela a que reconsidere la convocatoria y presente un nuevo calendario electoral "que haga posible la realización de elecciones con todas las garantías necesarias para un proceso libre, justo, transparente, legítimo y creíble, que incluya la participación de todos los partidos y actores políticos venezolanos sin proscritos de ninguna clase, observadores internacionales independientes, acceso libre e igualitario a los medios de comunicación, y con un Consejo Nacional Electoral cuya composición garantice su independencia y autonomía y que goce de la confianza de todos los actores políticos".
En Perspectiva se comunicó con el diputado del Partido por la Victoria del Pueblo, Carlos Coitiño, quien criticó la nueva postura de la Cancillería uruguaya. El PVP había emitido una declaración en la que ya se había rechazado por injerencista a dicha postura. "El objetivo apunta a debilitar al Gobierno que eligió el pueblo venezolano, en elecciones en que todos los observadores internacionales" dieron su respaldo, afirmó Coitiño en la entrevista.
Mesa relacionada:
Uruguay votó a favor de exhortar a Venezuela a reconsiderar las elecciones.
Nota relacionada:
“Si no hay elecciones [en Venezuela], ¿cuál es la salida?”, dice el diputado comunista Gerardo Núñez.
