El investigador principal en Energía y Sustentabilidad del Centro Latinoamericano de Ecología Social, Gerardo Honty, valoró en entrevista con En Perspectiva la propuesta que Uruguay presentará en la cumbre sobre cambio climático de París. Además, planteó los desafíos que enfrenta el país en esta materia.
Honty señaló que el cambio climático ya está impactando en nuestro país generando, por ejemplo, crecimientos en el nivel del mar y del caudal de los ríos y el aumento de la temperatura media.
El especialista en cambio climático estuvo en una reunión en la que se presentó la propuesta que llevará Uruguay a la cumbre del clima de París. “Se nos presentó información muy preliminar, muy en borrador”, dijo antes de contar que Uruguay está pensando en presentar medidas de intensidad de carbono por sector y no metas generales. En el sector eléctrico se va a establecer un límite de emisión de carbono por kilovatio hora producido. En el ganadero Uruguay planteará que por cada kilo de carne producido se reducirá un determinado porcentaje de emisión de metano respecto a 1990. También se establecerán metas para los procesos industriales.
Sin embargo, señaló Honty, los problemas de Uruguay están más bien en el sector transporte, en el cual no hay propuesta, porque vienen aumentan las emisiones como consecuencia del crecimiento del parque automotor privado y de carga.
Honty subrayó que hay un condicionamiento mutuo entre las metas para la emisión de gases de efecto invernadero y el plan de desarrollo del país. “Supongamos que Uruguay decidiera reducir las emisiones del sector transporte, eso implica que va a haber que destinar una serie de recursos al transporte público, a reducir las posibilidades del transporte privado, aumentar el eje ferroviario (…) son inversiones de largo plazo que tienen efectos en muchas décadas”, detalló.
La 21ª Conferencia de las Partes de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático se realizará del 30 de noviembre al 11 de diciembre en París. Honty explicó que la hoja de ruta de discusiones planteada hasta ahora termina en este encuentro y que si no se llega a un acuerdo será necesario empezar de vuelta.
El especialista explicó que el escenario es distinto a cuando se firmó el Protocolo de Kyoto, en 1997, especialmente por el crecimiento de China. En ese entonces estaba claro que el mayor esfuerzo en la reducción de emisión de gases de efecto invernadero debía ser de los países ricos, que a su vez debían transferir recursos a los países en desarrollo para que su crecimiento fuera más sustentable. Actualmente algunos países consideran que ese esfuerzo debería ser más compartido. “El bloque de los países desarrollados no va a firmar un acuerdo si los países en desarrollo no se ponen metas y no están dispuestos a transferir los recursos que se necesitan”, señaló.
