El Tribunal de los Contencioso Administrativo falló a valor del reclamo realizado por un grupo de unos cien ginecólogos de todo el país contra un decreto del MSP que reglamenta la Ley de interrupción voluntaria del embarazo.
El fallo definitivo permite, entre otras cosas, a todos los ginecólogos -no solo a los que presentaron el recurso- abstenerse de participar en cualquiera de los pasos que una mujer deba seguir para realizarse un aborto, por no estar de acuerdo con la práctica, lo que se considera objeción de conciencia.
Conocida la decisión del TCA, el MSP comunicó que tomará medidas para asegurar la atención a las mujeres que quieran interrumpir su embarazo.
Además, anunció que solicitará a todos los prestadores de salud que hagan llegar una lista de los médicos que han presentado objeción de conciencia. El objetivo de esta medida es fiscalizar que en todos los centros de salud haya ginecólogos dispuestos a llevar a cabo los procedimientos indicados.
Este fue uno de los temas tratados en La Mesa con Carina Novarese, Martín Couto, Hoenir Sarthou y Felipe Schipani.