Entrevista con el doctor Ricardo Pérez Manrique, presidente de la Suprema Corte de Justicia.
EN PERSPECTIVA
Martes 29.11.2016, hora 8.42
EMILIANO COTELO (EC) —Ayer, en conferencia de prensa, el ministro del Interior, Eduardo Bonomi, y el director nacional de Policía, Mario Layera, enfatizaron que el operativo montado el domingo para el partido clásico no falló, sino que, por el contrario, fue un éxito. Es más, Bonomi lo repitió, lo recalcó.
(Audio Eduardo Bonomi.)
Como no había 20 en la Olímpica después se dijo que el operativo fue un fracaso. El operativo fue un éxito: evitó todo lo que se quiso provocar por parte de quienes se plantearon determinados objetivos. Que, por supuesto, los objetivos son tratar de que se dé marcha atrás por el club, que hasta ahora venía resistiendo a no dar entradas, pero que esta vez dijo “no va más, no hay más entradas, no hay más dispositivos para las barras bravas”.
(Fin audio.)
EC —Para la policía, por lo menos 10 líderes narcos, algunos de ellos en prisión, son los autores intelectuales y materiales de la asonada que se armó para el domingo en torno al estadio. Layera, el director nacional de Policía, indicó que algunos de los traficantes organizaron estos incidentes desde la cárcel.
El propio presidente Tabaré Vázquez se refirió al asunto en contacto con periodistas uruguayos en Madrid. Declaró que la policía había abortado una asonada preparada para ejecutarse durante el encuentro Peñarol-Nacional, de la que tomaban parte barras locales y también colegas argentinos, hinchas de ese país, cuyo ómnibus fue detenido y se les confiscaron armas y drogas. Informó que lo mismo había ocurrido con otro ómnibus, pero que transportaba hinchas de Peñarol.
(Audio Tabaré Vázquez.)
Ayer estaba preparada una asonada en el Estadio Centenario, en la tribuna Ámsterdam. Así lo establecen los informes de inteligencia policial. Quienes lo iban a hacer eran dos o tres barras, cuatro, entre otras que venían de la Argentina.
(Fin audio.)
EC —Vázquez relató que un grupo concurrió a la sede de Peñarol a pedir 400 entradas para el clásico, y como no se las entregaron, comenzó a transitar en dirección al Estadio Centenario. En conocimiento del hecho, la policía detuvo a los cabecillas de quienes venían preparando los actos de violencia para la tribuna Ámsterdam que debían tener lugar durante el partido. La detención de barras determinó que el grupo que ya había ingresado al estadio desatara los actos vandálicos en ese momento, por ejemplo el ataque contra los puestos de venta de alimentos, incluso el lanzamiento de una garrafa robada de esos puestos, que terminó lastimando a un policía.
Ayer en la conferencia de prensa del Ministerio del Interior, las autoridades divulgaron dos grabaciones que provienen de comunicaciones telefónicas interceptadas por la policía antes y después del partido clásico, en las que se apoyó una parte del trabajo realizado.