Entrevista con el diputado Tabaré Viera (PC).
EN PERSPECTIVA
Jueves 21.04.2016, hora 8.31
EMILIANO COTELO (EC) —El presidente Tabaré Vázquez inauguró el martes pasado una serie de reuniones con los partidos con representación parlamentaria en busca de una política de Estado en materia de seguridad pública y convivencia ciudadana. Una novedad interesante, porque aborda un problema que está ubicado en los primeros lugares de las inquietudes de la gente, según muestran las encuestas. Un asunto en el que ha habido además notorios desencuentros entre oficialismo y oposición.
Durante el encuentro, ante una consulta de uno de los asistentes, Vázquez aclaró que no está en juego la remoción del ministro del Interior, Eduardo Bonomi, pero también subrayó que la convocatoria en sí misma era una indicación de que el Poder Ejecutivo está dispuesto a corregir el rumbo en esta materia. Luego, los delegados presente en sala y el propio gobierno intercambiaron documentos con propuestas y proyectos.
A la espera de la segunda reunión, en estos días los partidos y sectores se han dedicado a estudiar los proyectos que les entregaron las autoridades y a evaluar los próximos pasos.
Hoy va a sesionar el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del Partido Colorado (PC), y en esa ocasión, según se adelantó, el diputado Tabaré Viera, líder de Espacio Abierto (EA), propondrá que su colectividad se retire de las conversaciones multipartidarias.
¿Por qué? ¿Qué consecuencias tendría esa decisión?
Vamos a conversarlo con el propio diputado Tabaré Viera.
Cuando vino la invitación del Poder Ejecutivo a este encuentro, su partido tuvo una discusión interna sobre qué hacer. Y ustedes, en EA en particular, tuvieron algunas diferencias en la interna. Por ejemplo, entendían que al encuentro en la Torre Ejecutiva debían ir los líderes de los sectores del PC. Es más, lo propusieron y el CEN lo aprobó, pero finalmente no fue eso lo que ocurrió. ¿Qué pasó?
TABARÉ VIERA (TV) —Efectivamente, llegada la invitación del presidente, nos pareció –así lo propusimos y fue aprobado por unanimidad– aceptar la invitación y concurrir, habida cuenta de que hemos criticado, hemos denunciado, hemos planteado algunas ideas, algunas propuestas, proyectos, en fin, entonces cuando se nos convoca, se nos invita para conversar, para tener una aproximación, eso implica que hay un notorio cambio en la Presidencia de la República. Recuérdese que el doctor Vázquez cuando inició su Gobierno nos dijo que no iba a haber diálogo político, como no lo hubo, y como sí lo hubo al comienzo de otras administraciones, por ejemplo de la anterior, en la que se realizaron cuatro ámbitos sobre cuatro grandes áreas de diálogo, de puesta común entre todos los partidos, y se elaboraron documentos al inicio del Gobierno. Esto es notoriamente un cambio, y nosotros incluso lo asumimos como una aceptación de un fracaso y de querer escuchar.
Por lo tanto entendimos, y así lo aprobó el partido, que debíamos aceptar y concurrir. Yo propuse efectivamente que el partido concurriera con la mejor disposición, con todo su aporte, y además con la mejor y mayor representatividad. Esto es, con representantes del CEN, pero también con sus últimos candidatos a presidente o precandidatos a presidente, el doctor Bordaberry y el doctor Amorín.
Se hicieron consultas, y por razones que son propias y legítimas decidieron no aceptar, no concurrir; para mí era un error, pero en definitiva la posición oficial del partido era concurrir y con la mejor disposición. Y de hecho llevamos 20 proyectos de ley y aportamos algunas ideas más en la reunión sobre temas a resolver, a mejorar, que no son propiamente materia legislativa.
EC —Recordaba su posición, su reclamo de que el partido estuviera representado no solo por las autoridades formales, sino también por los líderes, por quienes habían sido precandidatos presidenciales en la última instancia, porque ahora, después de haber concurrido –usted sí fue–, dice que tal vez haya que dejar de ir, que los resultados que se obtuvieron en la primera reunión nomás lo hacen ser escéptico. ¿No le está dando la razón entonces, por ejemplo, al senador Bordaberry cuando había señalado públicamente que él no quería ir a un ámbito que era solo para la foto?
TV —No, creo que no es lo mismo. Una cosa es descartar antes de escuchar; me parece que siempre que alguien convoque al diálogo –yo soy dialoguista– hay que dar por lo menos una carta de crédito al principio, oír de qué se trata, analizar el planteo. Y ya no era incluso estratégicamente dejarle al presidente o al Poder Ejecutivo o al partido de Gobierno la chance de decir “critican pero cuando los llamamos no vienen”. Eso es una cosa.
Otra cosa es, una vez oídas, intercambiadas algunas ideas y algunos planteos, además de los proyectos planteamos como algo importante, fundamental, el cambio de ministro, porque es la primera señal clara que un Gobierno siempre da, en el Uruguay y en cualquier parte del mundo, cuando va a hacer realmente un cambio de política, siempre. Se ha dicho que los ministros son fusibles, y efectivamente, están allí casi casi como los técnicos de fútbol, su salida es de las primeras señales cuando se quiere hacer un cambio de verdad, un cambio profundo.
El ministro Bonomi es el ministro más antiguo del gabinete, hace seis años que está con su equipo al frente de la seguridad y los resultados están a la vista. Por algo el Gobierno cambia la actitud, hay una aceptación tácita de un fracaso. Y las cifras, los indicadores, terminamos el 2015 con 300 homicidios, 20.000 denuncias de rapiña –y se considera que hay muchas más que no se denuncian–, 55 rapiñas por día. El 75 % de la población se siente inseguro, y en Montevideo más del 80 % dice sentirse inseguro. Claramente es un problema gravísimo que vive nuestra sociedad, hay un fracaso.
Entonces, además de trabajar, de aportar, de hablar de proyectos de ley, de temas que hay que mejorar –como el sistema carcelario; yo aportaba el tema de las adicciones, que me parece fundamental atacar, porque están en la base del delito y de muchos problemas de nuestra sociedad, y hoy si un adicto aun voluntariamente quiere recuperarse no tiene prácticamente centros adonde ir, los pocos que hay son privados–, exigimos que el Poder Ejecutivo dé una señal clara de que va a haber un cambio de políticas.