Entrevista con los doctores Fernando Motta y Justino Menéndez, del Banco de Prótesis.
EN PERSPECTIVA
Viernes 25.11.2016, hora 8.19
EMILIANO COTELO (EC) —Hace 40 años la medicina uruguaya daba un salto en calidad y se colocaba a la vanguardia de la región.
A mediados de la década de los 70, el Banco de Prótesis inauguraba la primera “sala blanca” en el país y en América Latina. O sea, pasaba a contar con un espacio aséptico en donde realizar intervenciones quirúrgicas traumatológicas con mínimo riesgo de infección.
Hoy el Banco de Prótesis cuenta con dos salas blancas de última generación, que lo colocan en el mismo nivel de centros similares en Europa y Estados Unidos, y además recibe a traumatólogos de distintos países que vienen a entrenarse en sus instalaciones. Pero, sobre todo, cumple un papel de primera línea en el sistema de salud uruguayo, ya que sus operaciones son accesibles a toda la población.
Vamos a acercarnos a esta institución, averiguar su historia y conocer sobre su futuro. Para eso recibimos al doctor Fernando Motta, jefe del Departamento de Rodilla, y al doctor Justino Menéndez, jefe del Departamento de Cadera.
Comencemos por la historia. El Banco de Prótesis como tal nació en 1972 a iniciativa del doctor Óscar Guglielmone, un precursor en nuestro país del desarrollo de las cirugías de prótesis de cadera, y además un filántropo. Hablemos de aquel contexto, de cómo surgió el banco.
[¿?] —No se puede hablar del banco si no se habla de Guglielmone. Primero, por qué se llama banco. En la época en que empezaron las artroplastias, las prótesis, su implementación no estaba cubierta por las mutualistas y era una cirugía muy cara, entonces se hacía en forma privada. Guglielmone las hacía en forma privada, fue el primero que operó una prótesis en América del Sur y la operó en Rosario, Argentina. Y les ponía un plus, y con ese plus operaba a un paciente del hospital. De ahí el nombre, que derivó en Banco de Prótesis.
EC —Es bien ilustrativa esa historia, permite sacarnos una duda que muchos tenemos: ¿por qué esta institución se llama banco? Es como un chiste, además, tiene mucho de humor la denominación que se eligió.
[¿?] —Ahí nace el concepto de Guglielmone de tener una salud igualitaria. Peleó toda la vida por eso. Fue precursor, junto con el doctor Cañela, que era el ministro de Salud Pública, y con el doctor Orestes Fiandra, de la ley del Fondo Nacional de Recursos (FNR), que es una ley excepcional para Uruguay. A veces que nos invitan a hablar en algún otro país de lo que hacemos, nos preguntan porque tenemos experiencia en eso, contamos y todos quieren tener algo parecido, donde se pueda operar con la misma calidad, la misma eficiencia, en el mismo lugar, la misma prótesis al señor más pudiente y al señor menos pudiente.
EC —Impulsaron el FNR, pero mientras no existía se las ingeniaron para armar algo propio.
[¿?] —En el banco, justamente.
EC —Por eso la leyenda que está visible en el propio edificio: “Igualdad de derecho a la salud”. Es algo con lo que machacan permanentemente.
[¿?] —Ese era el concepto de Guglielmone y por supuesto de los que seguimos atrás de él.
EC —¿Alguna anécdota más que pinte la personalidad del doctor Guglielmone?
[¿?] —Anécdotas muchísimas. Sin duda fue una persona brillante, un niño que nació en Salto, que fue a la escuela rural a caballo y al que no le interesaba cosechar naranjas, como dijo desde niño, sino ser médico. Y fue uno de los brillantes médicos de este país. Siempre pensando en las personas con dificultades, tratando de resolver los problemas de esas personas que tenían un hándicap en contra. Y trabajó toda su vida, hasta el último momento en eso, en esta institución. Esta institución, como decimos siempre, tiene un valor increíble porque es de todos pero no es de nadie. Es una institución que no tiene dueños.
EC —Es una asociación civil sin fines de lucro.
[¿?] —Correcto. Pero creo que lo más importante y que destaca a esta institución es su capital humano. El capital humano vale oro en esta institución, toda la gente que trabaja ahí está comprometida con la institución y lo hace como si fuera su casa.
[¿?] —Además el concepto de adquirir conocimientos en la salud, también de Guglielmone, en un país chico como el nuestro; si usted hace muchos bancos de prótesis, muchas chacritas para hacer lo mismo, no va a lograr tener la experticia. Él decía que en un país como el nuestro tenía que haber uno, dos, tres centros, donde todos supieran bien lo que hacían: el cirujano, el que limpia la sala de operaciones, el enfermero que cuida en la sala. Eso ha llevado a que mejore la experticia del banco y hoy tengamos 55.000 cirugías.