EnPerspectiva.uy

Entrevista del lunes 31 de agosto de 2020: José Bayardi

Facebook Twitter Whatsapp Telegram

EN PERSPECTIVA

Lunes 31.03.2020

EMILIANO COTELO (EC) —Las confesiones que realizó ante un tribunal de honor militar en el año 2006 el coronel Gilberto Vázquez, incluida su participación en delitos de tortura y asesinato durante la dictadura, sacudieron el escenario político jueves, viernes, sábado y domingo, luego de que se divulgaran por primera vez las actas de los interrogatorios.

Estas confesiones se encuentran en las actuaciones de un tribunal de honor del Ejército que en 2006 juzgó a Vázquez por su fuga del Hospital Militar, al que había sido trasladado ese año desde la sede de la División 1 del Ejército para realizarle un examen médico.

Por ese hecho, el tribunal condenó a Vázquez con una sanción muy grave: el pase a la situación de reforma. Esa decisión fue cuestionada por el militar, pero terminó siendo confirmada por un tribunal de alzada y luego homologada por el gobierno de la época, encabezado por Tabaré Vázquez.

Pero ni el tribunal, ni el Ejército, ni las autoridades del Poder Ejecutivo tomaron medidas relativas a las confesiones de violaciones a los derechos humanos. La justicia penal no fue notificada de aquellas declaraciones.

La pregunta que quedó abierta la semana pasada es si el Ministerio de Defensa Nacional (MDN) encabezado por Azucena Berrutti recibió aquella documentación y no la trasladó o si, en cambio, esos papeles fueron ocultados por el comandante en jefe de aquel momento.

El debate se instaló porque las autoridades actuales del MDN entregaron a Madres y Familiares de Uruguayos Detenidos Desaparecidos (Familiares) todas las actas de los tribunales de honor de las Fuerzas Armadas que esa organización había pedido en junio en una solicitud de acceso a la información pública.

Estamos con el doctor José Bayardi, que era subsecretario de Defensa en el momento de actuación de aquel tribunal de honor, año 2006.

¿Cuál es su respuesta a esa pregunta que quedó abierta la semana pasada? ¿A la ministra nunca le llegaron las confesiones, efectivamente?

JOSÉ BAYARDI (JB) —A la ministra nunca se le dio cuenta, ni por parte de los miembros del tribunal de honor ni por parte del comandante en jefe de la época, de las declaraciones que hizo en el marco de ese tribunal de honor que fue citado por la fuga del Hospital Militar cuando estaba en detención preventiva por un pedido de extradición. Esa acta de declaración no fue puesta en conocimiento de la señora ministra ni por el comandante ni por los miembros del tribunal.

EC —¿Cómo se entiende que eso haya ocurrido así? Se lo pregunto porque el expediente es voluminoso, es un paquete enorme de fojas. De todo esto, ¿qué fue lo que llegó al ministerio, qué es lo que usted recuerda que llegó al ministerio?

MB —Llegó todo al ministerio, punto uno; nunca fue comunicado, en mi opinión, formalmente por el comandante que existía esa acta. Pero si uno ve la documentación –yo la he visto ahora– que se le entregó a Familiares, el expediente 5937-9 del año 2006, que fue el que permitió la homologación del fallo del tribunal de honor, y lo compara con los otros tribunales de honor, los que van a darse en el año 2016, 2017 y 2018 en adelante, uno ve que en el material que se distribuyó está todo, están las actas de declaración, las actas de deliberación y los fallos, pero el expediente 5937 está solo, comienza con el informe de la Jurídica. Quiere decir que el expediente entró todo al ministerio, fue al departamento jurídico del ministerio en la época y ahí se inicia el expediente, se hace un racconto de todo lo que contiene, entró a Jurídica el 27 de setiembre del año 2006 y a las 18.17 de ese mismo día se mandó digitalizar, pero no se mandó digitalizar las actas de declaración ni las actas de deliberación. Cuando uno ve ahora el reparto que se le hizo Familiares ve que está el expediente 5937, pero, a diferencia de lo que ocurrió con los otros tribunales, hay otra carpeta que dice “documentación anexada”. En esa documentación anexada aparecen las actas de declaración. O sea, el expediente fue a Jurídica, Jurídica separó las actas –probablemente porque las actas de tribunales de honor eran reservadas– y mandó digitalizar la resolución de homologación, con los fundamentos jurídicos de homologación. Eso fue elevado a la señora ministra el mismo 27, la ministra lo firmó el 27 y el 28 lo homologó el Poder Ejecutivo con la firma de Tabaré Vázquez.

EC —Me llaman la atención algunos detalles. La abogada del ministerio Nelly Méndez es la que hace el informe que se eleva a la ministra Azucena Berrutti, y en el punto 27 da cuenta de que el tribunal de honor militar había detenido las actuaciones a la luz del artículo 77 del reglamento, es decir, presunción de delito, y que luego había continuado la tarea tras el aval de quien entonces era el encargado de despacho del Comando porque el comandante en jefe, Carlos Díaz, no estaba en el país.

JB —Estaba el general Manuel Saavedra.

EC —Fue el general Manuel Saavedra quien dio la indicación de continuar.

JB —Sí.

EC —No se sabe por qué detuvieron sus actuaciones.

JB —La doctora Méndez tampoco se enteró de por qué, la doctora Méndez no sabe por qué.

EC —Pero ustedes, autoridades del ministerio, cuando recibieron ese informe de la Asesoría Letrada se enteraron de esto, de que había pasado algo en el trámite del tribunal de honor, de que se habían detenido las actuaciones ante la aparición de un presunto delito. ¿No hubo curiosidad al respecto?

JB —El delito puede ser civil o militar. No es que no haya habido, es que ella en realidad no tuvo conocimiento tampoco –no voy a responsabilizar ni mucho menos a la doctora–, en esa acta no se hace referencia a cuál pudo haber sido el delito que estaba asignado para haber detenido por el artículo 77. Ella aceptó eso y siguió. En todo caso, el comandante tendría que haber dado cuenta en su momento de que el delito era el que había declarado Gilberto Vázquez en ese momento.

EC —¿Y no había la costumbre de solicitar las actas completas de las actuaciones de los tribunales de honor?

JB —No, porque las actuaciones de los tribunales de honor son de diverso tipo. Y en realidad cuando vino informado sin ninguna noticia de ningún tipo de declaraciones de Vázquez que implicara delito, no se dio cuenta y siguió el trámite con el aval de la Jurídica del ministerio de aconsejar la homologación. Además está claro que el acta de declaración no venía en la documentación.

EC —Pero el acta sí estaba en el ministerio, como acaba quedar comprobado ahora.

JB —Claro, estaba, la Jurídica la tuvo.

EC —El ministerio le entrega a Familiares todo lo que tiene en su poder, incluidas estas actas con estas confesiones de Gilberto Vázquez.

JB —A ver, no estaban en el expediente. Yo puedo seguir el expediente, los que tenemos el expediente –y usted lo tiene, seguramente la prensa lo tiene– lo podemos seguir y en realidad esto va a la homologación el 28 de setiembre y vuelve al ministerio el 5 de octubre. Cuando vuelve al ministerio el 5 de octubre para el trámite, cuando va a la Dirección Central de Secretaría y a Personal Militar, que es donde deben quedar las copias de declaraciones, ahí un funcionario de Personal Militar dice “ojo que las actas a las que hace referencia la doctora en la foja 1 no están en el expediente”. Vuelve para atrás –ya estaba homologado– y a fojas 18 hay una fotocopia de un sobre que seguramente contenía las actas.

EC —Justamente, ¿esa referencia a unas actas que no estaban no llamó la atención a las autoridades del ministerio en su momento cuando recibieron el informe?

JB —No porque la Jurídica no puso una alerta. No creo que las haya leído, si informó en un día el expediente probablemente no las leyó, porque son de carácter reservado, supongo.

EC —Usted comparte que llama la atención la diferencia con el caso reciente, el de las confesiones de Gavazzo a fines del 2018 en un tribunal de honor que terminó generando el escándalo que generó el año pasado en el gobierno Vázquez. En ese caso tan sonado, el MDN, encabezado por Jorge Menéndez, sí recibió todas las actuaciones, al punto de que el entonces ministro, ahora fallecido, en su carta de renuncia, cuando se la pide Vázquez, dice que él revisó todas las actuaciones y que dio cuenta de los delitos que notaba.

JB —Estamos hablando de una Jurídica del ministerio del año 2018, y cuando el ministro Menéndez recibió todo lo hizo ver por sus asesores de Jurídica; fueron ellos –no porque les hubiera dicho el comandante Manini nada– los que en la lectura de ese material pusieron en alerta por esa declaración. Y si vemos ahora lo repartido –lo tengo delante de mí cuando estoy hablando con usted–, ese expediente de 2018 contiene todo. O sea, el expediente es único, está, fue repartido ya en su momento y contenía todo, contenía las actas, la valoración jurídica del tribunal, todo. En el otro caso, el expediente 5937-9 –repito, mire lo que se entregó– cuando se repartió no contenía las actas, esto es documentación anexada.

EC —Lo que impresiona es que no contuviera esas actas, porque cuando uno las lee se da cuenta de que todas estas confesiones que hace el coronel Vázquez no las hace porque sí, no las hace en un rato de demencia que le dio en ese momento, las hace para justificar por qué se había fugado, hace una larguísima explicación de lo que estaba ocurriendo en ese momento, las posibilidades de ir preso debido a eso…

JB —Las hace para fundamentar ante los generales que hasta ese momento se había protegido a los que habían tenido violado derechos humanos, les pone de frente, arriba de la mesa a los generales: ¿Cómo? ¿Hasta ahora el Ejército siempre nos protegió y ahora nos va a dejar baranda, nos va a dejar sin protección? Lo hace para eso. Basta leerlas todas.

EC —Sí, dice: “El hecho del tribunal de honor me interesa porque aquí tengo la oportunidad de decir las cosas como son y ustedes juzgarán y el Ejército juzgará y si el Ejército me cuelga, perfecto”. Esa es la frase textual. Pero adonde voy es que cuenta todo esto, confiesa lo que confiesa para explicar por qué decidió fugarse, porque él entre otras cosas quería hacer declaraciones a la prensa, etcétera. Entonces es llamativo, es muy llamativo que toda esta explicación de Gilberto Vázquez no figure en el material que les llega a la ministra y al subsecretario, ¿no?

JB —Es llamativo.

EC —Entonces ¿qué hay que entender?, ¿cuál es su interpretación?, ¿que las autoridades del Ejército de la época decidieron correr eso a un costado, ocultarlo?

JB —Mi interpretación es que las autoridades del ejército de la época decidieron ocultar esa declaración, así como el general Manini decidió ocultar y no dar cuenta de la declaración de Gavazzo respecto a la disposición del cadáver de Gomensoro.

EC —Hay una diferencia, porque cuando Manini eleva al ministerio todo el expediente del tribunal de honor de Gavazzo incluye las actas con las confesiones.

JB —De vuelta, en el 2006 también estaban incluidas, cuando va a la Jurídica, la Jurídica ve las actas, las enuncia no más, enuncia el título de las actas y no las manda en el expediente.

EC —Pero ¿entonces es Jurídica del ministerio quien actúa por órdenes del comandante en jefe del Ejército? ¿Es ahí que se produce “el ocultamiento”, según usted dice?

JB —No, no creo que haya sido por orden, creo que, como expresa la doctora, ella solo se interesó por destacar los elementos formales y no los contenidos. Lo dice en el expediente cuando arranca.

EC —Pero usted recién hablaba de un ocultamiento.

JB —Claro, el ocultamiento fue porque el comandante en jefe del Ejército debió haberle dicho a la ministra “mire que está esta acta […] que es lo que declaró Gilberto Vázquez”. Ahí está el ocultamiento. Por eso hoy son repartidas como documentación anexada, no están de la misma manera que están en el expediente de 2018, no se incorporaron digitalizadamente al expediente. Pero esto ha sido la historia de ocultamiento, de no asumir el tema de las declaraciones y de lo que fueron prácticas durante la época de la dictadura, eso se ha mantenido.

EC —Hablando de detalles que no se conocían hasta ahora, en esa verborragia de Gilberto Vázquez cuando explica por qué se fugó, señala que el comandante en jefe del Ejército les había ofrecido a él y a otros militares asumir la autoría de un crimen y ser juzgados por ese crimen en Uruguay a efectos de evitar la extradición que había sido solicitada por la justicia argentina por el caso Gelman. Tenían que asumir el caso de la desaparición en 1976 en Argentina de Adalberto Soba, militante del Partido por la Victoria del Pueblo. Es ahí, razonando a partir de ese ofrecimiento, que Gilberto Vázquez se molesta por el hecho de que el Ejército los va a dejar colgados.

JB —Ya venía molesto desde antes en esa declaración, porque dice “nosotros en realidad pensamos que no íbamos a permanecer –estamos hablando del pedido de extradición– detenidos como no permanecieron detenidos los del caso Berríos en la década del 90”. Ahí arranca y hace una aseveración. Después se empieza a plantear lo que usted decía ahora, que aparentemente el comandante de la época les insinuó “si quieren salvarse de la extradición a la Argentina –que las extradiciones a Argentina terminan en Devoto, etcétera–, hay que asumir responsabilidades acá”. Esa es la parte en que él hace el racconto. Y todo el fundamento que tiene Gilberto Vázquez ahí es decir “hasta ahora siempre nos han protegido y ahora parece que tenemos que ir a la cadena perpetua”.

EC —Sí, incluso señala que si hacen eso, por ejemplo Ramas iba a estar asumiendo un delito del que no participó, ahí Gilberto Vázquez confiesa que él sí estuvo en el caso Soba, dice: “Sí, yo estuve, pero Ramas no, y sin embargo le están pidiendo que se haga culpable de ese delito”. Ahí empieza a tirar del rollo y cuenta todo lo que cuenta. Pero ¿usted sabía de ese ofrecimiento, de esa negociación que había existido? Porque Gilberto Vázquez hasta involucra de alguna manera al presidente de la República, a Tabaré Vázquez.

JB —En lo más mínimo.

EC —Señala –leo textual–: “Un día nos dicen: ‘Mañana o pasado va a haber novedades porque el comandante tiene una reunión con el presidente, tiene una cena con el presidente’. Al otro día, después de la cena al mediodía, estaba Díaz, estaban el general de la división de Ejército 1 y yo, llegó el comandante y dice: ‘El problema es que a ustedes los quieren presos sí o sí’. Yo la información que tengo es que había tenido la noche anterior una reunión con el presidente, al otro día va para allá y nos dice que la cosa cambió, vamos presos sí o sí y ocho años como quien dice, dos días no, es cadena perpetua”. ¿Usted qué sabe de esas negociaciones en las que hasta el presidente Vázquez podría haber tenido participación?

JB —Está bien el “podría haber tenido”, es un condicional. Lo que puede haber pasado –yo no tengo ninguna confirmación respecto a lo que usted dice– es que le dijeron: “Mire, si en realidad están pidiendo la extradición van a marchar, salvo que asuman responsabilidades y sean juzgados acá”. Porque cuando hay un delito extraditable y se es juzgado en un país por el mismo delito, no se da la extradición por el mismo delito. Seguramente fue eso lo que estuvo planteado. Pero no me consta que haya habido una conversación, que haya venido del presidente. Vamos a entendernos, ubiquemos el contexto del año 2006, hasta el año 2005 la […] había cambiado, y es a partir de que se empiezan a sacar de la ley de caducidad las denuncias y se habilita que el Poder Judicial comience a actuar que terminan siendo procesados, entre ellos Gilberto Vázquez con 25 y 30 años por dos causas distintas. Parece que acá hubiera habido una acción deliberada de ocultar; es ofensivo para la doctora Berrutti pensar que pudiera haber estado enterada de esto y no lo hubiera comunicado, porque si alguien puso en conocimiento de lo que fueron archivos y todo fue la doctora Berrutti. Venir a decir ahora que se trató de ocultar esa información, cuando se pusieron al servicio de la justicia todas las comunicaciones que podían surgir de esos archivos para dar claridad a cuál había sido el lugar en el que había estado cada uno de los denunciados por violaciones a los derechos humanos, es por lo menos ofensivo o querer reconstruir la historia. Se la banco a los que tienen 30 años, a los que tenemos más de 30 no.

EC —Me quedan por lo menos dos preguntas para hacerle. Gilberto Vázquez dice más cosas en esa declaración, en ese testimonio, en esas confesiones. Señala que pensaba fugarse para comunicarse con la prensa y hacer otras cosas, “las mismas del 89”. Y con “las del 89” se refiere a que en aquel año él y otros militares habían recibido de los mandos del Ejército de la época instrucciones para realizar seguimiento de varios dirigentes políticos, Tabaré Vázquez, Eleuterio Fernández Huidobro, Hugo Cores, entre otros, y ese seguimiento tenía que hacerse con la eventualidad de después culminar con atentados, con ejecuciones, con muertes. O sea, cuenta que eso existió en el 89 y dice que iban a hacer algo parecido o estaba la posibilidad de algo parecido en 2006.

JB —No, dice que él iba a hacer algo parecido. Es más, no dice, porque en el 89 dice que iba a haber seguimiento de Cores, de Eleuterio Fernández Huidobro, de León Lev y de otro nombre que no me acuerdo. Pero más adelante dice: “Sí, y yo se la iba a dar al presidente”. Imagínese que el presidente hubiera tenido noción de esa acta y no hubiera dado cuenta en la justicia. Es inconcebible.

EC —Pero mi pregunta es: a propósito de esas confesiones, ¿qué dice usted?

JB —Yo no digo nada de las confesiones, tomo nota de las confesiones que hizo Gilberto Vázquez en el tribunal de honor.

EC —Usted era subsecretario en aquel año 2006, ¿no llegó a conocer nada de eso?

JB —En absoluto, como no llegaron a conocer nada la ministra ni el presidente, en absoluto. Y recién esas actas aparecen ahora anexadas.

EC —Pero podían haberlo sabido por otros lados, ¿esa posibilidad de atentados ustedes la habían recibido como dato por alguna fuente en aquel momento?

JB —No, no, no, si se hubiera sabido se hubieran tomado conductas respecto a eso, aunque era una cosa que ya había pasado porque estábamos en el año 2006 y él hace un racconto del 89. Pero sí se hubiera actuado porque él dice que estaba dispuesto a matar al presidente.

EC —Ahora que se sabe esto, ¿qué repercusiones entiende que debería haber?

JB —En todo caso todos tenemos que reflexionar, los analistas –yo no soy analista– y todos, sobre por qué esas actas que están anexadas se liberaron ahora, en el sentido de que se dio cuenta de que esas actas existían y se comunicaron ahora. Porque esas actas del tribunal de honor, ese expediente del tribunal de honor cuando fue a la justicia fue sin las actas. Estoy hablando de la década del 2006 en adelante.

EC —Se liberaron ahora porque el MDN accedió a una solicitud de acceso a la información pública que hizo Familiares.

JB —No, ese expediente ya se había liberado a la propia justicia en su momento y sin embargo no habían ido las actas, o no habían aparecido.

EC —¿De qué año estamos hablando?

JB —De 2006 en adelante, cuando el juicio de Gilberto Vázquez.

EC —¿Usted dice que lo que hay que investigar es ese ocultamiento, lo que usted llama ocultamiento?

JB —Que el ocultamiento existió no hay que investigarlo, existió, en todo caso habrá que ver las responsabilidades.

EC —¿A quién le corresponde investigar? ¿A una comisión investigadora del Parlamento, a la justicia?

JB —Ya lo tiene la Fiscalía y la Fiscalía dispondrá, en todo caso, si lo entiende del caso.

EC —Lo tiene Fiscalía Especializada en Crímenes de Lesa Humanidad. Hablábamos con el doctor Perciballe más temprano y él decía: “Eso no entra en mi órbita, en todo caso es tarea de otro fiscal”.

JB —Está bien, pero lo tiene la Fiscalía.

EC —Tendrá que resolver el fiscal de Corte, Jorge Díaz, qué fiscal examina eso.

JB —Exactamente. Lo que tenemos que preguntarnos es por qué quien conocía las actas, que sabía de la existencia de esa acta de Gilberto Vázquez, por qué ahora las hace aparecer. Eso es lo que hay preguntarse.

EC —Ahí usted está apuntando a Madres y Familiares, ellos pidieron estas actas.

JB —¡Por favor! ¿Cómo voy a apuntar contra Madres y Familiares, Emiliano?

EC —Quien pidió esta documentación fue Madres y Familiares.

JB —Sí, sí, pero si hubieran pedido el expediente que no tenía los anexos le hubiera llegado sin las actas, ¿entiendes lo que quiero decir?, pero en este momento alguien informó que existían esas actas en algún lugar.

EC —¿Alguien le informó a quién? ¿A Familiares?

JB —No. Familiares hizo lo que tiene que hacer y lo que ha estado haciendo siempre y bien. Alguien que conocía la existencia esa acta dijo “ahora también podemos liberar la entrega de estas actas”.

EC —¿Usted dice que alguien dentro de la estructura militar le dijo al mando actual del MDN que existían esos documentos?

JB —Los que estaban en conocimiento del acta dijeron “además de este tema, están aquellas actas”. Alguien, porque descarto que el ministro García no conocía las actas hasta que le llegaron.

EC —¿Para usted hay una operación política ahí?

JB —¿Y cuál sería el objetivo de la operación política?

EC —Usted dice que alguien, que sería alguien… no sé, de las Fuerzas Armadas…

JB —Alguien que conocía el contenido de las actas, que conocía el contenido de esa acta.

EC —… dijo: “Divulguen esas actas, miren que están estos documentos”.

JB —Alguien dijo: “Cuando llegue un pedido este de acceso a la información para este expediente, en el expediente las actas no están, pero las actas están acá o allá” y que se dieran a conocer.

EC —Hay una pregunta para usted también, doctor Bayardi. El viernes el periodista Mauro Bettega escribió en Twitter: “En abril 2019 solicité al entonces ministro de Defensa, José Bayardi, acceso a los expedientes completos con las declaraciones en actas y los fallos de los tribunales de honor de varios militares, entre ellos el de Gilberto Vázquez. No se me permitió acceder a las actas”. Esta fue una decisión suya.

JB —No, que no se le permitió acceder a las actas es una valoración de Mauro Bettega, porque el ministro no maneja el Departamento de Archivo Documental, el ministro no manejaba la Administración Documental, se dio la orden de que se diera el expediente que estaba en Administración Documental. Y en todo caso, yo no sé qué le llegó a Mauro Bettega, pero se le debe haber dado el expediente 5937,9 en información digital, que era lo que estaba en Administración Documental. Ahí no se habían digitalizado las actas, por lo cual se le entregó lo que estaba en Administración Documental. Doy por hecho que el funcionario de Administración Documental copió ese expediente en información digital y se lo dio. Pero ahí no estaban las actas, por lo cual no le ocultó… Yo no manejaba el archivo, lo manejaba un funcionario, y ese funcionario tenía la orden de que cuando venían los pedidos se contestaran de acuerdo a la Ley de Acceso a la Información. Para aquellos que dicen que hubo ocultamiento, la Ley de Acceso a la Información la generó el Frente Amplio, y esa ley tiene un artículo particular, el artículo 12, que dice que no se puede entablar ni reserva ni secreto ante constataciones de hechos vinculados a los derechos humanos.

EC —Usted dice que al periodista se le entregó lo que había y lo que no estaba no se le pudo entregar.

JB —Se le entregó lo que estaba en el expediente.

EC —Pero hace un rato usted señalaba que en el año 2006, al final del trámite del expediente, se terminan incorporando esas actas también al archivo del MDN.

JB —Se terminan archivando las actas en otra división, que es la División Personal Militar.

EC —No en el mismo lugar que la otra parte del documento.

JB —No, lo que archiva Personal Militar eran las acciones del tribunal. No se le incorporaron esas actas en el archivo general, que es el que depende de Administración Documental.

EC —Eso fue lo que repercutió, dice usted, en la respuesta que se le dio al periodista el año pasado.

JB —Al periodista se le dio lo que era el archivo del expediente que estaba en Administración Documental y no en Personal Militar.

EC —Lo que usted está señalando es que esta vez, ante el pedido de Madres y Familiares, se buscó documentación en dos lugares para poder entregar los paquetes.

JB —Supongo yo porque viene como documentación anexada, algo que está anexado no estaba en el documento original.

Transcripción: María Lila Ltaif

Comentarios