100 millones de personas observaron ayer el primer debate entre la candidata demócrata a la Casa Blanca, Hillary Clinton, y el postulante republicano Donald Trump. Desde Estados Unidos, el colaborador de En Perspectiva, Nicolás Albertoni contó que la atención que suscitó la contienda fue de la mayores desde que se televisa este tipo de eventos y fue incluso comparable con el debate entre Kennedy y Nixon.
Según Albertoni, Donald Trump se quedó con el primero de los tres bloques ya que salió a marcar presencia desde el inicio. Pero luego Clinton comenzó a rebatir sus argumentos con propuestas más concretas y ganó los dos siguientes mostrándose más tranquila y sensata. Según Albertoni, se vio a un Trump muy tenso y alejado de su típico discurso agresivo, pese a ser experto en el manejo del lenguaje televisivo.
La derrota del candidato republicano hace que crezca la expectativa para el próximo debate del 9 de octubre en Missouri. "No vamos a ver un Trump tan seguro y ganador como en los debates republicanos, cuando se ganaba la audiencia", consideró Albertoni. "Ahora el votante no quiere ver más show. Quiere ver sensatez y que cada candidato diga lo que va a hacer", finalizó.
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Foto en Home: Hillary Clinton y Donald Trump se saludan en el primer debate presidencial de Estados Unidos. Crédito: Timothy A. Clary/AFP Photo.
