Luego de casi un mes de negociación, el Gobierno llegó a un acuerdo con el consorcio GNLS para que se desvincule de la obra de la planta regasificadora en Punta Sayago. Según la ministra de Industria y Energía, Carolina Cosse, el Gobierno entiende que el arreglo es “óptimo”.
EN PERSPECTIVA
Miércoles 3.9.2015
Por Rodrigo Abelenda ///
La ministra Carolina Cosse comunicó la novedad durante una interpelación a la que había sido convocada por el diputado nacionalista Pablo Abdala, preocupado por la incertidumbre que reinaba en torno a este desarrollo luego de que, a fines de julio, se confirmara la salida de GNLS, un consorcio conformado por la belga Gaz de France Suez y la japonesa Marubeni que tenía a su cargo la implantación y la futura operación de la planta. Para dar ese paso GNLS adujo sobrecostos no previstos en la obra y problemas con la brasileña OAS que había sido subcontratada para la construcción. Desde entonces faltaba definir en qué condiciones se daba su desvinculación y si había riesgo de un juicio contra el Estado.
Los antecedentes
Ayer en la Cámara de Diputados la ministra Cosse repasó todo el proceso de salida de GNLS. El contrato de concesión establecía que GNLS para el 3 de enero de este año debía tener pronta la plataforma del muelle en donde atracará en el futuro el barco regasificador.
Por otro lado, GNLS debía terminar para el 11 de junio pasado las primeras obras de la terminal, que incluye una escollera, un gasoducto subacuático, un gasoducto terrestre y una Unidad Flotante de Almacenamiento y Regasificación. GNLS no cumplió con ninguna de estos dos plazos.
¿Qué podía hacer el Estado frente a estos dos incumplimientos? El contrato establecía que Gas Sayago (la sociedad anónima integrada por Ancap y UTE, encargada de llevar adelante el proceso) podía rescindirlo unilateralmente recién nueve meses después del primer incumplimiento, es decir, el 3 de octubre de este año.
A fines de julio, GNLS comunicó formalmente su imposibilidad material de continuar con las obras y posteriormente ofreció negociar una salida inmediata. La ministra Cosse explicó ayer que de haber optado el Estado por la recisión unilateral, se habría terminado seguramente en un litigio, por lo que se decidió aceptar la salida negociada propuesta por el consorcio.
El acuerdo
Durante agosto se elaboró un convenio que, según Cosse, ya tiene el visto bueno del presidente Tabaré Vázquez y ahora sólo debe ser aprobado por el directorio de GNLS. El arreglo comprende, por un lado, una compensación para Gas Sayago SA equivalente al cobro total de la garantía establecida en el contrato, que alcanza a los US$ 100 millones.
Por otra parte, GNLS transfiere a Gas Sayago SA, sin recibir ninguna contraprestación a cambio, toda la infraestructura que se llegó a construir en el mar y en tierra. Estos activos son transferidos sin costo, pero según Cosse están valuados en otros US$ 100 millones. Además la ministra destacó que en la primera etapa de los trabajos Gas Sayago SA adquirió “activos intangibles”, como información de mercado o de las condiciones de construcción, que ponen al gobierno en una mejor posición para reestructurar el proyecto con menores costo de operación.
Una parte de esos activos que GNLS transferirá, valuada en US$ 800 mil, está siendo reclamada a este consorcio por terceros como parte de proceso concursal en el que entró la brasileña OAS. Recordemos que OAS entró en concurso de acreedores en abril de este año, jaqueada por denuncias de corrupción en Brasil. Cosse agregó que en el texto GNLS declara expresamente que permanece como único responsable frente a terceros por sus incumplimientos anteriores a este arreglo. Además quedaron sin efecto las garantías soberanas que Ancap y UTE habían comprometido en la firma del contrato de concesión con GNLS.
Según Cosse, “en un escenario de recisión forzada” no hubiera existido estas condiciones que, a su juicio, son favorables para el Estado. La ministra aseguró que además se evitó un litigio “extenso y oneroso” en un tribunal de arbitraje internacional.
(Audio Carolina Cosse)
"Si comparamos este acuerdo, elaborado con el resultado más optimista que se podría haber obtenido por la vía de la recesión unilateral y posiblemente el litigio lo obtenido es óptimo. El acuerdo recoge una solución que contempla todos los derechos de Gas Sayago derivados del contrato e incluso mejora su posición en algunos aspectos."
(Fin audio)
La reacción de la oposición
El diputado Abdala hizo notar que por la cláusula 35 del contrato la transferencia de los bienes por parte de GNLS se hace sin contraprestación del Estado siempre que esos activos no hayan sido cedidos en garantía en favor de acreedores. En otras palabras, Abdala interpretó que Gas Sayago SA deberá pagar la deuda que GNLS contrajo con terceros acreedores.
(Audio Pablo Abdala)
"Ahora la ministra nos dice que hicieron un acuerdo. Y nos dice que ese acuerdo incluye que en tal caso GNLS transfiere todos los activos y por lo tanto se hace el único responsable frente a terceros. Y yo pregunto: ¿este maravilloso acuerdo que la ministra ha venido en la tarde de hoy a anunciarle al país en el pleno de la Cámara de Diputados, es oponible a los terceros? ¿Es oponible a los acreedores? ¿Es oponible a aquellos que le prestaron dinero a GNLS que aparece en una actitud tan seria y tan responsable renunciando por lo tanto al contenido de la cláusula 35, en términos de que esos terceros no vengan después a demandar al Estado uruguayo?"
(Fin audio)
Abdala enfatizó que lo que más le preocupa es que el Estado herede las obligaciones que tenía GNLS.
(Audio Pablo Abdala)
"Aquí se han constituido derechos y se han constituido derechos reales. Y por lo tanto hay consecuencias patrimoniales inexorablemente. Bueno fuera tener que celebrar que GNLS no nos va a hacer un juicio. ¿Cómo nos va a hacer un juicio si acaba de incumplir un contrato de concesión de cerca de US$ 3.000 millones de dólares? Pero el problema no es que nos haga un juicio GNLS. El problema es que nos vengan a reclamar los terceros a los cuales GNLS les debe."
(Fin audio)
Durante la sesión Abdala fue muy crítico con el desarrollo del proyecto de la regasificadora, empezando por el proceso de selección que culminó en GNLS. Señaló, por ejemplo, que ésa no había sido la oferta más económica ni la mejor evaluada técnicamente. Indicó que el ex presidente de Brasil, Luis Ignacio “Lula” Da Silva, hizo “lobby” con Mujica para beneficiar a OAS. Y, en otro orden, puso en duda que el Estado pueda cobrar la garantía a GNLS y dijo estar convencido de que la situación planteada derivará en sobrecostos para el país.
El futuro de la obra
En la exposición de motivos del proyecto de ley de presupuesto quinquenal, que el gobierno envió el lunes al Parlamento, se indica expresamente que, finalizada la negociación con GNLS, se “seleccionará un nuevo adjudicatario para dar continuidad a la obra”. Según el gobierno, el costo de los trabajos y la infraestructura es de US$ 600 millones, de los cuales hasta 2014 se ejecutaron US$ 210 millones, restando US$ 390 millones por concretarse en el período. En esta línea, Cosse dijo ayer que el Estado saldrá “nuevamente al mercado” una vez que “determine los costos con precisión”, aunque adelantó que serán menores que los estimados en el proyecto original.
(Audio Carolina Cosse)
"El proyecto no fracasó. Se han protegido los intereses del Estado, se ha negociado con todo el marco normativo vigente defendiendo los intereses del Estado. O sea de todos los uruguayos y se ha alcanzado un muy buen acuerdo".
(Fin audio)
¿Cuándo estará finalmente funcionando la regasificadora? Según estimó la ministra, en el segundo semestre de 2017.
La regasificadora Punta Sayago
La planta regasificadora Punta Sayago, un proyecto anunciado en el gobierno de José Mujica, se inserta dentro de la política de cambio en la matriz energética que se viene implementando en el país. La apuesta es que, junto con las energías renovables, el gas natural licuado contribuya a la generación de electricidad y alimente a la industria, desplazando el uso de hidrocarburos.
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